Un derrame cerebral, seguido de un infarto masivo, cegaron la vida del músico y director Carlos “Charlie” Collazo Rivera, jefe de la agrupación salsera La Corporación Latina.
El artista, de 62 años de edad, falleció en el Hospital Pavía, donde permanecía recluido hacía más de una semana tras sufrir complicaciones de salud.
Los restos de Collazo serán expuestos el martes, 17 de mayo en la funeraria San Agustín, ubicada en el barrio Puerta de Tierra, donde nació el pianista.
No se ha precisado si sus restos serán cremados o enterrados.
“Papi murió en paz y contento. Fue un gran hombre y muy dedicado a su familia, su música y sus amigos”, manifestó a Inter News Service Menorka Collazo, hija del artista quien por más de tres décadas también se desempeñó como profesor de inglés en varias escuelas de Santurce, Puerto Rico.
Artífice del sonido de La Corporación Latina, Collazo labró un importante legado musical al capitanear desde sus inicios, en 1966, una de las mejores orquestas que ha cultivado el género salsero clásico y que aún persiste como uno de los mejores proyectos rítmicos nacionales.
La Corporación Latina, que matizó su sonoridad con un toque particularmente criollo, surgió como una propuesta musical puertorriqueño en anteposición al movimiento salsero que comenzaba a emerger en la ciudad de Nueva York, al igual que ocurrió en la Isla con la fundación de las agrupaciones La Primerísima de Tommy Olivencia, El Gran Combo de Puerto Rico, La Selecta de Raphy Leavitt, Carpet Diem de Isidro Infante e Impacto 71, entre otras.
Desde el corazón de Puerta de Tierra, barrio obrero de la zona histórica de San Juan, La Corporación Latina marcó un sello de identidad rítmico armado, en un principio, por influencias provenientes de la amplia frontera de nuestra herencia afroantillana.
Sus primeras apariciones artísticas resaltaron por hilvanar un sonido limpio, en una armonización sencilla, que tomaba de ejemplo el sexteto de Joe Cuba.
Poco después, fue ampliando su batería rítmica hasta crear una portentosa orquesta que, al mando de Charlie Collazo, pronto despuntó como una de las más imponentes agrupaciones del país.
Su primera producción discográfica se lanzó al mercado en 1972 y, de inmediato, convirtió el tema “Amor maldito” en uno de los favoritos del público.
Mas no fue hasta 1974 que el devenir de la orquesta se elevó a grandes dimensiones cuando, en las voces de Guelo Cruz y Joe Belo, grabaron el álbum “Orquesta Corporación Latina”, que incluyó los éxitos “Desengaño”, “Solo he vivido”, “Trompeta y bongó”, “Qué pasa” y “Eres tú, mi amor”. Este disco, que se mantuvo número uno en el hit parade por más de tres meses, fue galardonado con un Disco de Oro y con el premio de la Mejor Banda del Año, viabilizando su internacionalización.
Las distinciones al maestro Collazo fueron aumentando, como ocurrió en 1975 con la otorgación de su segundo Disco de Oro por el disco “Try it and You’ll like it”, que incluyó los éxitos “Vagabundo”, “Amigo”, “Siciliana” y “Desengaño Parte II”.
La producción “Llegó pa’ quedarse”, trabajada en 1976, y con la que se conmemoró la primera década de la orquesta, también obtuvo una estatuilla dorada.
En el último tiempo, y tras 45 años de fundación, La Corporación Latina se ha mantenido activa realizando presentaciones y armando proyectos discográficos.
Aqui en Son y Sabor, Expresamos nuestros sentimientos de Condolencia a todos sus Familiares.
El artista, de 62 años de edad, falleció en el Hospital Pavía, donde permanecía recluido hacía más de una semana tras sufrir complicaciones de salud.
Los restos de Collazo serán expuestos el martes, 17 de mayo en la funeraria San Agustín, ubicada en el barrio Puerta de Tierra, donde nació el pianista.
No se ha precisado si sus restos serán cremados o enterrados.
“Papi murió en paz y contento. Fue un gran hombre y muy dedicado a su familia, su música y sus amigos”, manifestó a Inter News Service Menorka Collazo, hija del artista quien por más de tres décadas también se desempeñó como profesor de inglés en varias escuelas de Santurce, Puerto Rico.
Artífice del sonido de La Corporación Latina, Collazo labró un importante legado musical al capitanear desde sus inicios, en 1966, una de las mejores orquestas que ha cultivado el género salsero clásico y que aún persiste como uno de los mejores proyectos rítmicos nacionales.
La Corporación Latina, que matizó su sonoridad con un toque particularmente criollo, surgió como una propuesta musical puertorriqueño en anteposición al movimiento salsero que comenzaba a emerger en la ciudad de Nueva York, al igual que ocurrió en la Isla con la fundación de las agrupaciones La Primerísima de Tommy Olivencia, El Gran Combo de Puerto Rico, La Selecta de Raphy Leavitt, Carpet Diem de Isidro Infante e Impacto 71, entre otras.
Desde el corazón de Puerta de Tierra, barrio obrero de la zona histórica de San Juan, La Corporación Latina marcó un sello de identidad rítmico armado, en un principio, por influencias provenientes de la amplia frontera de nuestra herencia afroantillana.
Sus primeras apariciones artísticas resaltaron por hilvanar un sonido limpio, en una armonización sencilla, que tomaba de ejemplo el sexteto de Joe Cuba.
Poco después, fue ampliando su batería rítmica hasta crear una portentosa orquesta que, al mando de Charlie Collazo, pronto despuntó como una de las más imponentes agrupaciones del país.
Su primera producción discográfica se lanzó al mercado en 1972 y, de inmediato, convirtió el tema “Amor maldito” en uno de los favoritos del público.
Mas no fue hasta 1974 que el devenir de la orquesta se elevó a grandes dimensiones cuando, en las voces de Guelo Cruz y Joe Belo, grabaron el álbum “Orquesta Corporación Latina”, que incluyó los éxitos “Desengaño”, “Solo he vivido”, “Trompeta y bongó”, “Qué pasa” y “Eres tú, mi amor”. Este disco, que se mantuvo número uno en el hit parade por más de tres meses, fue galardonado con un Disco de Oro y con el premio de la Mejor Banda del Año, viabilizando su internacionalización.
Las distinciones al maestro Collazo fueron aumentando, como ocurrió en 1975 con la otorgación de su segundo Disco de Oro por el disco “Try it and You’ll like it”, que incluyó los éxitos “Vagabundo”, “Amigo”, “Siciliana” y “Desengaño Parte II”.
La producción “Llegó pa’ quedarse”, trabajada en 1976, y con la que se conmemoró la primera década de la orquesta, también obtuvo una estatuilla dorada.
En el último tiempo, y tras 45 años de fundación, La Corporación Latina se ha mantenido activa realizando presentaciones y armando proyectos discográficos.
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